jueves, 7 de marzo de 2013

Cristo de la Sed



EL CÓMO Y PORQUÉ DE ESTA IMAGEN

Cuando se me encarga la propuesta de ejecución de la obra de un crucificado, el cliente muestra interés porque yo lea unos textos titulados "Tengo Sed".
Esta escultura de Cristo crucificado está basada en el contenido de esos escritos. En ellos se habla sobre una experiencia mística que experimentó la madre Teresa de Calcuta en la que dialoga con Dios, y éste le hace saber la necesidad que siente por el amor del alma de los hombres.


“No importa que es lo que hayas hecho, te amo por ti mismo. Ven a mí con tu miseria y tus pecados, con tus problemas y necesidades y con todo tu deseo de ser amado. Estoy a las puertas de tu corazón y llamo… Ábreme porque tengo sed de ti…”

Ante el reto de trasladar una idea como esta al terreno de lo concreto, la lectura me sugiere la idea de comunicación. El crucificado extiende su mano para pedir a la madre Teresa que le ayude a conseguir el amor de sus almas: “En tu amor por mi ellos me verán , me conocerán, me querrán”...
Y al mismo tiempo extiende su brazo para ofrecer como Cristo eucarístico su amor a los hombres.
Quise aproximar en el gesto la imagen a la Madre Teresa que lo contempla a sus pies. Por este motivo lo represento abatido de piernas y retorcido de tronco. Con estos recursos pretendo crear una sensación de cercanía con el interlocutor, intento mostrarlo abatido pero poderoso y bello en su debilidad de hombre.